Gominolas caseras

La receta que os traigo hoy seguro que no os deja indiferente a nadie, a todo el mundo bueno a casi todo el mundo le gustan las gominolas. No tienes que ser un niño para que en un momento del día te apetezca darte un pequeño placer. Cuando las haces con niños es una gozada por que les encanta ver como se hacen sus golosinas preferidas. Además si quieres pueden ayudarte en el último paso de la receta que es cuando hay que rebozar la gominola en el azúcar -eso si hay que estar pendientes de los dedos por que más de una vez van para la boca-.



Ingredientes

•  2 sobres de gelatina neutra
• 1 sobre de gelatina de sabor (fresa, limón, piña,...)
• 150 gr. de azúcar
• 200  ml. de agua
• azúcar para decorar

Preparación

• Pon a calentar el agua a calentar en un cazo.
• Antes de que empiece a hervir, echa la gelatina neutra y remueve hasta disolver. Después añade la gelatina de sabor, y vuelve a remover hasta disolver.
• Una vez disueltas las gelatinas añadimos el azúcar y removemos hasta que este completamente disuelto.
• Vertemos la mezcla en una jarra y removemos con una varilla hasta que la mezcla queda una textura un poco esponjosa. Dejamos reposar unos minutos y volvemos a batir.
• Vertemos la mezcla en los moldes y dejamos enfriar a temperatura ambiente hasta que solidifique. Yo en este caso tenia estos moldes que son específicos para chocolate, pero puedes utilizar también las famosas cubiteras de silicona de Ikea con formas.
• Cuando ya están solidificadas las sacamos de los moldes, y las rebozamos en azúcar.

Para su conservación podemos guardarlas en un bol de cristal, en una bolsa,... eso si no creo que os duren mucho. Yo en esta ocasión solo las he hecho de fresa por que era la única gelatina que tenía en casa, pero cuando las hago suelo hacerlas de varios sabores y las meto en bolsas de celofán, las pego con washi-tape y reparto, que como dice el refrán a nadie le amarga un dulce.






Recordar que si queréis que ponga las fotos de vuestras recetas en el blog tan solo tenéis que mandarlas y podrán ver todos vuestras creaciones.

 

Merengues o Soplillos

Me encantan los merengues..... nunca los había hecho, y cuando ojeando uno de mis muchos libros de repostería vi la receta  no dude en hacerlo, ponía que eran tan facilitos de hacer... que no me pude resistir... y aquí estánnnn... me han quedado muy bien lo único que tengo que practicar más es con la manga pastelera, pero bueno, todo se hará... os pongo la receta y espero que os gusten tanto como gustan en mí casa.
Ademas cada vez que los tomo tengo recuerdos de Almería bueno más bien de Laujar de Andarax, que es el pueblo donde veraneo todos los años y tengo a mí familia...allí se les llama soplillos.

Ingredientes para aproximadamente 32 merenguitos o soplillos

•  3 claras de huevos
•  180 gr. de azúcar
•  1 cucharada de Maizena
•  Esencia de Vainilla

Preparación

• Precalentamos el horno a 120º , en este caso, los merenguitos o soplillos necesitan una temperatura muy baja. Preparamos la bandeja de horno con papel de horno.
• Batimos las claras a una velocidad media de la batidora. Vais a ver que al rato empiezan a espumar. 
• Le vamos agregar el azúcar cuando visualmente las claras parezcan espuma de afeitar. Le vamos a incorporar el azúcar, junto con la Maizena. Ponemos la velocidad al máximo de velocidad y le incorporamos el azúcar poco a poco. De este modo, se integra bien con las claras y el merengue se hace más rápido. La Maizena va ayudar a que luego los merengues permanezcan secos más tiempo. También se puede utilizar la mitad de azúcar común y la mitad de azúcar glass. En este caso no tendríamos que añadir la Maizena ya que esta  última tiene almidón de maíz y provoca el mismo efecto.
• Agregamos la esencia de vainilla. Esto es opcional, a mi me gusta mucho el gusto y el aroma de la vainilla, así que le pongo a todo! pero si no queréis ponerle, obviar este paso.
• Debemos batir hasta que el merengue este bien firme. Cuanto mas firme este el merengue, mas fácil va a ser manejar la manga.
• Colocamos el merengue en la manga y hacemos las figuras en la placa. Para poner el merengue en la manga me ayudé con un vaso alto o una jarra. De esta manera es fácil de llenar toda la manga. Luego para hacer las figuras, se puede optar de cualquier pico, yo decidí utilizar un pico liso, pero pueden usar uno estriado. 
• Metemos la bandeja al horno. El tamaño que yo hice fue de un tamaño para tomar de un bocado,  y el tiempo aproximado que los tuve en el horno fue de 25 min. aproximadamente. El tiempo de horneado va a depender del tamaño de los merenguitos. En todos los casos, no importa si son pequeños o grandes, cuando termine el tiempo de horno, lo apagáis y los dejáis hasta que el horno este frío. No los saquéis estando calientes porque se van a bajar.
• Cuando ya este frío el horno, podéis sacarlos y guardarlos en una bolsa, o en un bote o caja hermética. Si los guardan bien cerrados, aguantas bastante tiempo.

Lemon Curd

En esta semana me ha traído una de mis hermanas una enorme bolsa de limones del limonero que tiene en su casa, y cada vez que tengo limones frescos viene a mi cabeza hacer Lemon Curd.
No es que sea una crema muy ligera ya que lleva una gran cantidad de mantequilla y azúcar, pero su sabor es realmente delicioso.

Los curds (que significa literalmente algo así como cuajados en inglés) son unas cremas típicas de la gastronomía británica, que se preparan cuajando zumos con yemas o huevos, azúcar y una cantidad indecente de mantequilla.

A finales del siglo XIX y principios del XX era tradicional en Inglaterra servir crema de limón (Lemon Curd) casera con pan o scones para acompañar el té como alternativa a la mermelada, además de como relleno para tartas, pasteles pequeños y tartaletas. La crema de limón casera solía hacerse en cantidades relativamente pequeñas, ya que no se conservaba tan bien como la mermelada. En épocas más recientes era factible preparar cantidades mayores gracias a la disponibilidad de la refrigeración.

Existen variantes que emplean diversos cítricos como la lima y la mandarina, fruta de la pasión, mango, y bayas como el arándano o la mora.

A la hora de hacer la primera receta de Lemon Curd la mejor recomendación es hacerlo al baño maría para evitar cuajos de huevo por falta de control de la temperatura, pero siempre se puede hacer más rápido directamente en el cazo, lo único necesario es mover con las varillas constantemente y controlar que la temperatura no supere los 70º C.

La receta procede de The British Larder (la despensa británica), el blog de una chef que dirige un hotelito rural con restaurante en la campiña inglesa…


Ingredientes

• 4 yemas medianas
• 1 huevo mediano
• 125 g de zumo de limón recién exprimido (unos 3 limones)
  
• Ralladura de un limón
• 125 g de azúcar blanquilla 
• 125 g de mantequilla fría, cortada en cubitos pequeños
• 1 pellizco de sal

Preparación 

• Rallamos la piel del limón y reservamos. Si ha quedado grande (según el rallador que usemos), la trituramos con el azúcar. 
• Exprimimos los limones hasta obtener el peso de zumo indicado y lo colamos.
• Ponemos en un cazo las yemas, el huevo, el zumo de limón, la sal y el azúcar. Mezclamos con cuchara de madera.
• Colocamos este cazo sobre otro cazo mayor con agua hirviendo para cuajar la crema al baño maría. Removemos sin parar con la cuchara hasta que la crema empiece a espesar.
• Proseguiremos unos 5 minutos, hasta que la crema sea capaz de cubrir el dorso de la cuchara claramente, pero no debe llegar a hervir.
• Sacamos el cazo del fuego y añadimos la mantequilla troceada. 
• Removemos con unas varillas hasta que se haya incorporado.

Espero que probéis hacerla. Y la semana que viene la utilizaremos en la receta.