La zanahoria se ha usado en pasteles dulces desde la Edad Media, época en la que los endulzantes eran escasos y que unos precios muy elevados, mientras que la zanahoria, que es una de las verduras que más azúcar contiene a excepción de la remolacha azucarera, era más fácil de encontrar, por lo cual era muy utilizada para elaborar postres y elaboraciones dulces.
Los pasteles de zanahoria estuvieron ampliamente disponibles en restaurantes, cafeterias y pastelerías estadounidenses a principios de los años 60. Al principio era una moda, pero debido al éxito conseguido y la popularidad alcanzada a pasado a ser un postre muy típico y popular en todas las casas americanas.
Ingredientes
Bizcocho
- 3 huevos
- 150 g de azúcar
- 100 g de harina
- 100 g de aceite de oliva
- 1 sobre de levadura química
Cobertura de queso
Preparación
Bizcocho
Bizcocho
- Lo primero que hacemos es cocer la zanahoria.
- La escurrimos y desmenuzamos.
- Batimos en un bol o en el robot de cocina los huevos y los batimos con el azúcar hasta que este completamente integrada, cuando ya esta bien integrado añadimos el aceite y seguimos batiendo.
- Añadimos la levadura y la harina que previamente habremos tamizado y mezclamos.
- Cuando ya esta todo bien mezclado añadimos la zanahoria y volvemos a mezclar bien,
- Colocamos en un molde que previamente habremos engrasado y enharinado. Yo en esta ocasión lo que he hecho ha sido ponerlo en moldes de magdalenas para poder servirlas a modo cupcakes.
- Horneamos a 180º C durante 35 minutos, pero si optáis por los moldes tipo cupcakes ir comprobando cuando han llegado a su punto.
- Sacamos del horno y dejamos enfriar en el molde unos 15 minutos, una vez pasado el tiempo lo sacamos y dejamos enfriar.
Glaseado
- El glaseado es muy sencillo y rápido. Bate la mantequilla reblandecida y el azúcar glass hasta que tengas una mezcla esponjosa, pálida y cremosa.
- A continuación añade el queso y bate otro poco hasta que se integre todo.
- Resérvala en la nevera unos 20 minutos
Montaje
- Puedes abrirlo por la mitad y distribuir la crema de queso en dos capas o disponer una sola de forma generosa por encima.
Yo en esta ocasión la puse en una manga pastelera y la adorne poniéndola en los cupcakes poniendo de adorno unas nueces peladas.
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